Por Nubbitel
agosto 3, 2023
Hoy venimos a darte una gran noticia y es que, adelantándonos a la práctica totalidad de la competencia, hemos comenzado a implementar IPv6 en toda nuestra red. No te preocupes si no lo entiendes. Te lo vamos a explicar un poquito más. Lo primero, decirte que el IPv6 es un nuevo protocolo de direccionamiento de internet que introduce direcciones IP más extensas. Podríamos decir que estas direcciones son como las matrículas que identifican a los dispositivos cuando se conectan a Internet. El IPv6 ha sido desarrollado para asegurarnos de contar con suficientes direcciones IP en los años venideros. Es una tecnología que se enfoca en la seguridad y la conectividad de nuestros dispositivos. Te contamos qué es y cuál es su utilidad.
La base de funcionamiento de Internet radica en las direcciones IP, que actúan como matrículas únicas para cada dispositivo conectado. Actualmente, se emplea el Internet Protocol version 4 o IPv4 para estas direcciones; no obstante, su uso ha presentado un problema crítico: se han agotado todas las direcciones generadas por este protocolo.
Como respuesta a esta situación se comenzó a introducir el protocolo IPv6 o Internet Protocol version 6, que llevaba siendo objeto de debate desde 2008. Este nuevo protocolo ha sido concebido para crear direcciones IP en cantidades suficientes para dar soporte a todos los dispositivos conectados hoy en día y a los que se espera en el futuro cercano.
Internet alcanza una nueva dimensión con IPv6
Las direcciones IPv4 son representadas por 232 bits, lo que permitió la generación de 4.294.967.296 direcciones, una cifra que, con el tiempo, se ha demostrado claramente insuficiente. En cambio, IPv6 cuenta con un espacio de 2128 bits, lo que lo capacita para albergar 340 sextillones de direcciones, equivalente a un total de 340.282.366.920.938.463.463.374.607.431.768.211.456 direcciones IP distintas.
Esto implica que las direcciones IPv6 son mucho más extensas y complejas que sus contrapartes IPv4. Mientras que las direcciones IPv4 tienen una estructura del tipo 255.255.255.255, las nuevas direcciones IPv6 presentan una forma como esta: 2001:db8:3333:4444:CCCC:DDDD:EEEE:FFFF. Como se aprecia, estas últimas son más largas y combina letras con números. Son representaciones que pueden simplificarse, por ejemplo, los ceros iniciales de cada grupo pueden omitirse, aunque cada grupo debe contener al menos un dígito hexadecimal. Puede haber otras maneras, pero tampoco queremos marearte con un lenguaje demasiado técnico.
Hasta mediados de 2019, los datos apuntan a que la adopción de IPv6 apenas superaba el 25%, aunque es una tasa que ha ido avanzando de manera adecuada, y se prevé que las cifras más próximas alcancen en torno a un 30%, para, posteriormente, experimentar una desaceleración, estancándose en torno a dicho porcentaje.
Lo que parece definitivo es que el protocolo IPv6 garantiza que tendremos suficientes direcciones IP para respaldar el crecimiento de dispositivos conectados en los próximos años. Es cierto que aún quedan direcciones IPv4, ya que algunos revendedores ofrecen paquetes de direcciones rehabilitando las que ya no se utilizan, lo que explica el motivo por el cual muchos aún hacen uso de ellas y otras soluciones como el uso del CGNAT, no obstante, el IPv6 asegura que contaremos con IPs disponibles en el futuro. Ésta es, sin lugar a dudas, la gran ventaja de su implementación, pero hay más.
El propósito central del nuevo protocolo es lograr un Internet sin limitaciones, y en este proceso, también se han implementado mejoras significativas. Por ejemplo, al contar con direcciones IP más extensas, la seguridad se fortalece enormemente, ya que descifrar datos o llevar a cabo ataques básicos requeriría miles de millones de años en lugar de unos pocos minutos. Estas nuevas direcciones, con su amplia combinación de letras y números, resultan mucho más resistentes a intrusiones en comparación con las sencillas direcciones como 255.255.255.255.
Además, el protocolo IPv6 se encarga de la configuración de manera automática para evitar los problemáticos errores de configuración. Asimismo, se prevé que este protocolo contribuya a mejorar los recursos y el tráfico de la web, especialmente para evitar las dificultades experimentadas con el IPv4.
Otro aspecto a tener en cuenta es que elimina el NAT de la red, permitiendo conexiones directas entre nuestros dispositivos y los servidores de internet, ya que cada uno de ellos dispondrá de una dirección IP pública.
La mayor ventaja radica en que la industria y el ciberespacio garantizan disponer de suficientes direcciones IP para mantener sus operaciones sin contratiempos durante los próximos años. Aunque coexistirán con las direcciones IPv4 mientras empresas continúen revendiéndolas, aún no es posible saber si habrá una transición abrupta hacia IPv6.
Algo muy importante es que IPv6 nos agrega una capa de seguridad al permitir de manera opcional encriptación entre nuestro dispositivo y el servidor utilizando IPSEC de manera nativa.
IPv6 mejora exponencialmente la seguridad en nuestras conexiones
Desde luego que es un protocolo mucho más eficiente, tanto para la navegación, como para los dispositivos intermedios, como nuestro router, al no tener que traducir una dirección interna a una dirección pública.
Otra implementación que se realiza con IPv6 (MIPv6) es la posibilidad de que nuestros dispositivos móviles mantengan en itinerancia los prefijos de direcciones que ya tenemos asignados.
No obstante, para tranquilidad de los usuarios, los sistemas operativos modernos pueden configurar ambos tipos de direcciones, por lo que, a la hora de conectarnos, todo seguirá como siempre. Por tanto, no hay motivo de preocupación. Tu experiencia de conexión será la mejor posible. Navegarás mejor y mucho más seguro. Si necesitas más detalles pincha aquí.
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